Este capítulo es un tanto más largo que los demás (e iba ser más largo), pero para que no se tornara aburridor lo dividí en 2 partes; por lo tanto ésta es la primera parte y la segunda estará en el cap. 6.
El tormento de la pesadilla es demasiado, como no lo soporto más, me despierto, dirigiéndome al baño, me lavo y me cambio a pantalones y camisa. Sin pensarlo dos veces, sé que hoy es el día. Me voy de caza.
Lo he estado
posponiendo puesto que yo misma tenía miedo de que me volviera a pasar lo mismo
de unas semanas atrás… Pero ahora estoy segura, y evitaré usar rutas
desconocidas. Recojo mi arco y flechas ubicadas en el vestíbulo, no sin antes
ordenarme un poco el alboroto de pelo que tengo, arreglándolo en mi sencilla
trenza de siempre. Salgo por la puerta principal y me encuentro con una nublada
mañana de primavera. Hace una brisa fresca y de inmediato sé que es un gran día
para cazar. Medito si debo pasar por la casa de Peeta a darle los buenos días,
como él siempre hace, pero al final lo descarto ya que es muy temprano y
seguramente debe estar dormido.
Llego
rápidamente a la Pradera donde saludo a Thom y otros compañeros con los que he
hablado últimamente, ya que los días en los que puedo y no me ataca tan fuerte
el dolor de mis pérdidas…, he salido a ayudar a reubicar a personas del 12 en
sus antiguos hogares, ahora la mayoría reconstruidos. El gran hoyo que había,
que antes estaba al descubierto, ahora lo cubre una fina capa de tierra, que
pronto dará paso al pasto. Sin embargo, lo rodeo, ya que siento como si
irrespetara a los difuntos pasando por encima de ellos.
Cuando por
fin tengo el bosque a mí alrededor, respiro profundamente, disfrutando del contacto
del aire en mis fosas nasales. Acelero el paso mientras subo por las colinas
hasta el lugar de encuentro con Gale. Cuando llego me acomodo en un rincón de
las rocas, a la espera de algún signo de movimiento cerca. Pasan los minutos y
no hay nada, por lo que no me queda más opción que moverme. El valle está justo
delante de mí, con verduras y raíces por recoger, así que me adentro en él, en
busca de presas.
Alrededor
del mediodía, tengo dos pavos silvestres y un conejo; nada mal para alguien que
tiene meses sin cazar. Sin embargo
estoy agotada y mi estómago ruge, es notable
que mi estado físico no es el mejor, pero esperaba que pudiera rendir más.
Despellejo al conejo y le quito las plumas a los pavos, decidiendo llevárselos
a Sae y que ella hiciera lo que quisiera con ellos, al fin y al cabo no soy yo
la que cocina. Antes de marcharme recojo unas bayas y moras, acordándome de que
a Peeta le podrían servir para hacer sus tartas. Sonrío ante el recuerdo de su
nombre en mi mente, sintiéndome algo ridícula.
De camino a
mi casa, paso por la de Sae a entregarle las presas, a lo cual ella responde
muy sorprendida de que no hubiera ido al bosque sola pero que al fin y al cabo
ya estaba aquí así que ya qué. Me acepta las presas, prometiéndome que pasaría
más tarde a llevarme algo de la comida que preparara. Decido pasarme por la
tienda de comestibles y comprar algo de leche y aceite para tener en la
despensa, que se está quedando sin provisiones. Al llegar a la Aldea de los
Vencedores, pienso en pasar primero a la casa de Peeta y entregarle lo que
recogí, pero decido que mejor llego a mi casa a dejar las cosas que compré, no
queriendo llevar mucha carga a la casa de Peeta, contando además que aún llevo
el arco y las flechas; no sé por qué no lo dejé en el tronco hueco del árbol de
siempre, supongo que quería traerlo de nuevo a casa. Así que obligo a mis pies
a moverse más rápido hasta mi casa.
Cuando estoy
dentro, me dirijo a la cocina, guardo las cosas rápidamente, y pongo el arco y
flechas en su lugar. Visualizo una pequeña canasta cerca en la repisa, la cojo
y guardo allí los frutos que recogí. Salgo afuera y camino los pasos que hay
hasta la casa de Peeta. Cuando toco la puerta, noto cierta ansiedad, creo que
ha sido por tanta caminata. Pasan los segundos mientras espero pacientemente
que la puerta se abra. Cuando por fin se abre, no es Peeta, es Haymitch. Parece
que no se hubiera bañado en siglos.
-¡Vaya! Qué
sorpresa tenerte aquí en mi casa, preciosa.-exclama Haymitch, tengo que voltear
un poco la cabeza ya que el olor a alcohol es abrumador.
-Haymitch.-
saludo brevemente.- Me parece que ésta no es tu casa.
En ese
momento sale Peeta, preguntando quién es; entonces me ve y sonríe, le
correspondo la sonrisa. Se pone al lado de Haymitch.
-Ah sí,
Haymitch, vino preguntando si tenía algo de alcohol, al parecer olvidó dónde
queda la licorería.- me dice Peeta sonriendo- Voy a llevarlo a su casa. Vamos
Haymitch.-guía a Haymitch a que salga, cuando va bajando los escalones de la
entrada, se voltea- Pasa Katniss, ya regreso, siéntete en tu casa.
Entro, y lo
primero que capto es el olor a pan. Me dejo llevar por el exquisito olor y
termino en su cocina. Tiene todo muy ordenado, el horno está encendido,
confirmando mis sospechas de que está horneando pan. Me sitúo alrededor de la
mesa, y diviso que en el centro de ella hay un pequeño cuenco con algunos de
los bollitos de queso que tanto me encantan. Decido tomar uno, degustándolo
hasta el final. Cuando termino, sé que alguien está detrás de mí.
-Lo siento,
me comí uno de tus bollos.- digo en tono de disculpa, dándome la vuelta.
-Ya sé que
te gustan, por eso los hago.- responde Peeta sonriendo.- ¿Qué tal tu día?
-Bastante
bien, te traje esto.-levanto la canasta que llevo en la mano.- Pensé que
podrías usarlas en tus tartas.
-¿Qué? ¿Qué
es?- pregunta sorprendido mientras toma la canasta y revisa su contenido.- Ohh,
Katniss… ¿fuiste al bosque?
-Sí.-respondo
sincera.- Tenía que hacerlo, Peeta... ¿No te gustan los frutos?
-Obvio que
sí. Pero no debiste haber ido al bosque… ¿te sentiste bien? ¿Estás bien?- me
pregunta, observándome detenidamente, preocupado.
-Sí, en
realidad, estuvo muy bien, necesitaba al menos un rato el aroma del bosque,
aunque sí fui precavida…- aparto un poco la mirada- aproveché la mañana y traje
además dos pavos silvestres y un conejo, ya se los llevé a Sae.- comento
mientras de nuevo alzo la vista.- Y pues se me ocurrió traerte unas cuantas
moras y bayas.
-De verdad
lo aprecio, Katniss, gracias. Pero sí sales, ve con cuidado por favor.
Su
comentario hace que me sonroje un poco, entiendo su preocupación, pero me hizo
sentir que era una niña de 8 años y no pudiera valerme por mí misma. De igual
modo se lo agradezco, él es una de las pocas personas a las que le importo de
verdad.
-Bueno pues
haré un poco de mermelada.-continúa, cambiando de tema- Y luego me ayudarás a
untarla en la tarta.
Así nos
pasamos gran parte de la tarde, untando y rellenando un pequeño pastel, el cual
después disfrutamos con un poco de té. Es una actividad entretenida, en donde
liberamos un poco la tensión, olvidamos por un momento la fea realidad que nos
acecha, simplemente viviendo del momento. Cuando terminamos de merendar, le
ayudo a recoger y organizar un poco el desastre de la cocina, guardando un poco
del pastel para mañana.
-Sae irá a
mi casa más tarde a llevarme la comida que hizo con las presas que le llevé. ¿Te
gustaría venir y acompañarme en la cena? - le pregunto mientras paso un paño
sobre la mesa.
-Claro,
suena bien. Pero tendría que lavarme primero, después llego a tu casa, ¿te
parece?
-Vale.
Terminamos
de organizar su cocina, luego rápidamente nos despedimos y me promete que
estará pronto para la cena. Apenas llego a mi casa, aprovecho el rato libre
para darme una ducha y cambiarme de ropa ya que la que tenía la llevaba puesta
todo el día.
Me decido
por un pantalón verde oscuro y blusa gris que estaban un poco al fondo de mi
armario y un par de sandalias planas de cuero negras; no recuerdo que las haya
tenido pero supongo que en mi estado de robot no las noté. Cuando bajo a la
cocina, Sae me está esperando ya con mi plato puesto sobre la mesa.
-Oh, ¿Qué
tal vas Katniss?- me pregunta cuando me ve en el umbral.- Ya tienes tu comida
servida, adelante. Preparé el pavo en un guiso con verduras. Te guardé otro
poco por si quieres más.
-Umm, toda
vá bien. Y no creo que vaya a querer más, invité a Peeta a comer así que puedes
servirle el poco que me guardaste a él por favor.- le indico mientras camino
hacia la mesa.
-Ah claro,
bueno como quieras.-dice amablemente. Se pone a servir el resto de la comida en
otro plato y yo me limito a mirar constantemente el reloj en espera de que
Peeta llegue.- Tranquilízate, Katniss.
-¿Qué?- no
tengo ni idea de qué habla.
-Que no te
impacientes, puedo ver que estás ansiosa, ya llegará.- ¿Qué estoy ansiosa? Creo
que más bien es hambre, pienso. Sae coloca el plato sobre la mesa y justo
cuando iba a seguir hablando, suena el timbre.
-Yo voy.-
digo antes de que ella vaya a abrir. Avanzo los pasos hasta la puerta principal
y abro la puerta. Por alguna razón, verlo ahí, parado frente a mí, con sus
brillantes ojos azules clavados en los míos hace que me den ganas de tirarme
sobre él y abrazarlo, sin embargo me contengo y lo hago pasar.
-Hola Sae.-
saluda Peeta cuando llegamos a la cocina. Intercambian unos cuantos comentarios
más, hasta que Sae anuncia que ya se marcha.
-Bien, los
dejo. Que tengan una buena noche. Katniss, te veo mañana para el desayuno.-
dice mirándome.
-Ummm bueno,
que tengas una buena noche también.- respondo, ya con ganas de ponerme a comer,
mi estómago ruge. Peeta se despide igualmente, se sienta en una de las sillas
alrededor de la mesa, y oímos la puerta cerrarse. Cuando por fin estamos solos,
advierto que está un poco distraído, nervioso quizás, y evita el contacto
visual. Pasamos la cena básicamente en silencio, interrumpidos solamente por
los comentarios de Peeta sobre lo deliciosa que está la comida. Aunque me
inquieta un poco su actitud, no digo nada ya que no quiero dañar el momento.
Cuando
terminamos, recojo los platos y él se ofrece a lavarlos pero me niego, ya los
lavaré yo más tarde.
-Sabes que
me enteré de que Plutarch Heavensbee no ha perdido tiempo con respecto al plan
que tenía sobre ‘llevar el entretenimiento a las pantallas de Panem’, -dice
Peeta mientras espera a que organice la mesa.-Nada que ver con el
entretenimiento típico del Capitolio ya sabes cuál…, sino algo totalmente
distinto y mucho mejor. ¿Querrías ver un poco?
De repente
recuerdo que Plutarch mencionó algo parecido, algo sobre cantantes… De igual
modo acepto; algo animado para aligerar el ambiente iría bien. Nos sentamos en
el sofá de color verde oliva que está en la sala de estar frente al televisor y
nos dedicamos a mirar el programa que precisamente es un concurso de cantantes,
el cual resulta bastante entretenido y no me sorprende ver que Caesar
Flickerman es el presentador, aunque luce más delgado y usa ropa de colores más
normales, lleva siempre esa alegre actitud, que hace sentir más confianza a los
participantes. Empiezo a adormecerme y descubro mi cabeza recostada sobre el
hombro de Peeta sin querer…
-Katniss te
vas a perder la mejor parte.- oigo que dice Peeta, pero la bruma del sueño me
atrapa y me dejo llevar a un mundo lleno de sombras…
Adelanto: Ya tengo listo el capi 6, y aviso que tendrá un poco de drama asdfgh een fin!
Sobre el capítulo me pareció interesante añadir información sobre nuestro presentador Caesar Flickerman, que me pareció siempre un personaje súper agradable :) además tenía la duda de que había pasado con él, así que eso fue lo que creo que le pasó después de la guerra.
Espero que les haya gustado, y de nuevo, si quieren expresar su opinion, ya sea buena, regular o mala(constructivamente)! dejen su comentario. :D
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yo exijo el siguiente capitulo en esta semana no me puedes dejar así por favor :) estuvo genial tu capitulo por favor :)
ResponderEliminarHahahaha XD Umm pues ya veremos..., maybe yes,maybe not...
EliminarNaaaa mentira, no me aguanto tanto y lo subo el sábado o algo así pero de que lo subo antes de que se acabe la semana, lo subo:D
¡Graaciaas! y graaacias por comeeentarr:3
Jjajaja es cierto!!! Jiji:D Me ha encantado y ya me estoy preparando para el capitulo 6 que como tiene un poco de drama, como has dicho... Jajajaja pero bueno, esperemos lo mejor:D Genial el capitulo:)
ResponderEliminarSaludos .lll.
Neeee no es nada malo... o ¿tal vez sí? XD eh no diré nada c:
Eliminar¡Graaacias por leer y comentar! me alegro que te haya gustado :)
Saludos igual .|||.